¿Quieres tener lo que Esther tiene?
Bien, Entonces Bienvenido al club!
Declarar “Yo Soy Segundo” no es algo natural, tampoco lo es creer en alguien a quien no puedes ver físicamente. Permítenos explicarte.
Vivir SegundoCómo Esther Fleece aprendió a dejar de esconder su pasado
Para activar los subtítulos, simplemente reproduce el video, toca el botón de subtítulos (el ícono cuadrado cc) y selecciona el idioma que prefieras.
“Uno diseña su vida para lucir de cierta manera, y entonces su peor pesadilla sucede”.
Por fuera, la vida de Esther Fleece lucía ideal. Disfrutaba de más de diez años de éxito escribiendo y dando conferencias acerca de temas de fe y familia. Sin embargo, en medio del éxito, escondía el dolor profundo y oscuro de su pasado. Llevaba una máscara.
Cuando niña, Esther comenzó a notar las lesiones en el cuerpo de su mamá y cómo ella y su mamá con frecuencia huían de su casa repentinamente para hospedarse en hoteles. Su papá, el hombre a quien ella consideraba un héroe, rápidamente se convirtió en la persona más peligrosa que ella conocía.
Mientras tanto, comenzó a participar en la escuela para escapar el dolor de lo que sucedía en su casa. Aunque su vida real estaba fuera de control, ella creó una fachada que la llevó al éxito. Lidió al vivir una vida que era hermosa desde afuera.
Veinte años pasaron antes de que el pasado de Esther la atrapara. En 2010, al hablar en una conferencia en California, supo que su padre biológico estaba en su casa, persiguiéndola. El temor se apoderó de ella y todos sus mecanismos de defensa se vinieron abajo en un instante.
¿Continuaría viviendo su vida exitosa mientras era consumida por el temor y la desilusión? ¿Llegaría a entender a qué se parece el verdadero amor?
“Tengo esta increíble esperanza de que mi historia no ha terminado, pero eso no depende de mí”. Para saber más acerca de la historia de Esther, obtenga su libro en inglés “No More Faking Fine” (No más fingir estar bien).
Bien, Entonces Bienvenido al club!
Declarar “Yo Soy Segundo” no es algo natural, tampoco lo es creer en alguien a quien no puedes ver físicamente. Permítenos explicarte.
Vivir Segundo